top of page
Buscar
  • Foto del escritorAdmin

Los requisitos para servir a Cristo


Lucas 19.1-9


1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad.

2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico,

3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura.

4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí.

5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.

6 Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso.

7 Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador.

8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.

9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham.


Al enviar a su Hijo al Mundo, Dios no tuvo la intención de que fuera una celebridad. Cristo vino a servir. Como sus discípulos, debemos seguir su ejemplo y servir a un mundo perdido que sufre. En el pasaje de hoy, leemos acerca de Zaqueo, quien comenzó a demostrar las cualidades que vio ejemplificadas por el Señor.


Comprensión: Aunque estaba rodeado por una multitud, el Señor se detuvo y se fijó en un hombre en particular que estaba trepado a un árbol. Zaqueo era odiado y rechazado porque era un recaudador de impuestos. Aunque era rico, le faltaba algo, y Cristo reconoció su necesidad. Conocemos a muchas personas como Zaqueo: necesitadas, vacías, solitarias y en busca de esperanza. Pero con frecuencia, estamos distraídos por nuestras actividades, y ni siquiera nos damos cuenta de las necesidades de esas personas.


Accesibilidad: El Señor se dirigía a Jerusalén para llevar a cabo el acto más importante en la historia de la humanidad, que fue nuestra redención. Sin embargo, se detuvo para dedicarle tiempo a un hombre con necesidades espirituales.


Aceptación: Aunque Zaqueo era un pecador notorio, el Señor no le dijo: “Corrige primero tu conducta, y entonces iré a tu casa”. No estamos llamados a corregir a las personas, sino a compartir con ellas el evangelio transformador de Cristo.


¿Qué tal le está yendo a usted en su servicio a quienes le rodean? Tal vez sea el momento de fijarse en quién pueda estar necesitado. Dios pone todo tipo de oportunidades en nuestro camino, pero si no les prestamos atención las perderemos. A veces, solo necesitamos hacer una pausa, orar y abrir los ojos.

31 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page